Leyendo este artículo sobre los perfiles que hay en una agencia me he dado cuenta de que ya sabría responder a esa pregunta de ¿cómo te describirías en pocas palabras? la organizadora compulsiva. Si lo sé, soy una pesada con las fechas, la organización, la eficacia en tiempo record, pero gracias a mi insistencia y a mi pesadez consigo que las cosas salgan.
Me gusta pertener al equipo y siempre estoy de su parte, para apoyarles y defenderles ante los de arriba y ante los clientes. Por parte contraria, soy la traductora de la creatividad y la tecnología de cara a cliente lo que les permite comprender y concoer mucho mejor el trabajo y las ideas, llegando a comprender bien lo que nos compran.
Este rol que puedo ocupar en la agencia no está muy bien valorado pero es eficiente y permite desatascar los marrones con soluciones rápidas, quizá no las mejores pero sí las que más rápido se pueden poner en marcha. Esto también implica el enfrentamiento por perfiles perfeccionistas, detallistas y delicados que por desgracia a veces tienen egos y posiciones de responsabilidad que ponen freno y obstáculos a las soluciones.
Lo importante es saber convivir, no tener enfrentamientos y no tomarse el trabajo como algo personal ya que en la mayoría de los casos podríamos irnos de cañas tranquilamente y no pasaría nada, aunque con algunos no iríamos ni a coger el metro. Las agencias actualmente se componen de muchos tipos de perfiles que además ocupan diversos roles, la capacidad de gestionar todo ello con mayor eficacia depende mucho de las dotes de liderazgo y mano izquierda de la dirección.
Cada agencia es un mundo, cada gestión bien distinta y todas tienen sus cosas buenas y sus cosas malas. Sobre todo, por muy rol que sean no consiste en destacar, ser más o menos sino ser parte del equipo que hace que todo funcione, a veces motor de empuje, a veces coche escoba, pero siempre parte de.
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